A juicio por llamar «maricón de mierda» a un joven en la puerta de un céntrico pub de Salamanca
La Gaceta.- La Fiscalía de Salamanca acusa a un hombre de un delito de odio por un altercado ocurrido el 30 de septiembre del pasado año en un conocido local de copas del centro de la ciudad. Se trata de una de las primeras acusaciones del Ministerio Fiscal por delito de odio en Salamanca por el que el acusado, M.A.G.M., se enfrenta a una pena de un año y tres meses de prisión, así como a una pena de inhabilitación especial para profesión u oficio educativo en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre, por tiempo de cuatro años. Le acusa además de un delito leve de lesiones por el que le pide el pago de tres meses de multa con una cuota diaria de 8 euros (2.160 euros).
El fiscal reclama asimismo que el acusado indemnice a la víctima con 129 euros por los tres días de perjuicio básico que tardó en curar de sus lesiones y en la cantidad de 1.000 euros en concepto de daños morales inherentes a la naturaleza humillante de los hechos.
Según recoge el fiscal en su escrito de calificación provisional, al que ha tenido acceso LA GACETA, sobre las 02:15 horas del día 30 de septiembre de 2022, el perjudicado se encontraba trabajando como relaciones públicas a la puerta del establecimiento hostelero.La Gaceta.-
En un momento dado, se acercó a él un grupo de jóvenes, entre los que se encontraba el ahora acusado, quien, conocedor de la condición de homosexual del afectado, lo miró de arriba abajo, y movido por su animadversión a la orientación sexual del mismo, le propinó una patada y le dijo: «Puto maricón de mierda».
La víctima le reprochó entonces su comportamiento, a lo que el acusado, nuevamente, con ánimo de humillare públicamente y de menoscabar su integridad física, le propinó un puñetazo en la cara, diciéndole una vez más: «Maricón, que no tenías que existir».
Gracias a la intervención de terceras personas, prosigue el fiscal, el acusado cesó momentáneamente en su hostil actitud, personándose minutos más tarde en el lugar de los hechos una dotación de la Policía Local que procedió a la identificación del acusado quien, en presencia de numerosas personas, incluido uno de los agentes que intervenían, dijo en voz alta: «A ver si a cuenta de un maricón de mierda voy a tener algún tipo de problema».
Como consecuencia de la referida agresión, el afectado sufrió lesiones consistentes en contusión malar izquierda, requiriendo para su sanidad de una primera asistencia facultativa y tardando en curar de las mismas tres días.
En septiembre de 2021, los Juzgados de Colón acogieron un juicio en el que la Fiscalía acusaba a otro varón de un delito de odio por llamar «maricón de mierda» a un joven entre las zonas de ocio de San Justo y la Gran Vía. Los hechos tuvieron lugar en marzo de ese año, cuando en presencia de numerosas personas y a gritos le insultó, según el fiscal, por su condición homosexual.
En el juicio, el acusado reconoció los insultos contra el otro varón, pero no las amenazas y alegó que para nada lo había hecho por su condición homosexual, circunstancia que dijo que desconocía.
La víctima mantuvo por su parte su versión de los hechos que, declaró, atentaron contra su intimidad y que como consecuencia de los mismos se sintió humillado.
Ante ello, el fiscal mantuvo su petición inicial: un año de prisión y 1.680 euros de multa por un delito de odio.
Penas de hasta 4 años de cárcel
El artículo 510 del Código Penal español castiga con pena de prisión de uno a cuatro años y multa de seis a doce meses a quienes «públicamente fomenten, promuevan o inciten directa o indirectamente al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra un grupo, una parte del mismo o contra una persona determinada por razón de su pertenencia a aquél, por motivos racistas, antisemitas u otros referentes a la ideología, religión o creencias, situación familiar, la pertenencia de sus miembros a una etnia, raza o nación, su origen nacional, su sexo, orientación o identidad sexual, por razones de género, enfermedad o discapacidad».
Añade en el segundo apartado que «los hechos serán castigados con una pena de uno a cuatro años de prisión y multa de seis a doce meses cuando de ese modo se promueva o favorezca un clima de violencia, hostilidad, odio o discriminación contra los mencionados grupos».
