Charlas LGTBI: «A los chavales del colectivo les enseñas que no son bichos raros y al resto les abres un mundo»
- Desde Cogam explican que los talleres sirven para normalizar la diversidad y prevenir y combatir el acoso escolar
- El 60% de alumnos LGTBI ha sido acosado y el 80% de ellos no ha salido del armario, según sus informes
Rtve.- La discriminación y los delitos de odio contra el colectivo LGTBI van en aumento. El último informe del Ministerio del Interior cifró en 271 las agresiones en 2017, casi un 18% más que el año anterior. Pero la discriminación y los prejuicios comienzan desde la infancia. Como cuando un niño de cinco años escucha cómo otros niños se dirigen a él en tono despectivo como “maricón”, o como “marimacho” si es una niña. El ‘bullying’ o acoso escolar es una realidad para el 60% de menores que no pertenece a lo heteronormativo, según el último informe de “LGTB fobia en las aulas 2015” elaborado por COGAM.
Y mientras siguen produciéndose agresiones, surge una voz en la esfera política, Vox, que pone en cuestión leyes contra la LGTBIfobia y pide identificar con nombre y apellidos a quienes, amparados por estas leyes, imparten cursos y talleres en colegios e institutos. “Naturalmente seguiremos pidiendo información de quiénes son los que entran en aulas de nuestros hijos a enseñarles no se sabe qué”, decía esta misma semana el portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros. Una petición que derivó en una cadena de solidaridad en las redes sociales bajo el hástag #ApuntaMiNombreVox y a una denuncia de Podemos en Madrid.
“No es ningún adoctrinamiento, es simplemente decir que el mundo es muy diverso y que tenemos una responsabilidad sobre el nivel de felicidad de la gente que nos rodea”, explica a RTVE.es Aitor Villafranca, uno de los ponentes voluntarios de Cogam, una de las asociaciones que imparte talleres en institutos y colegios madrileños.
“No es ningún adoctrinamiento, es simplemente decir que el mundo es muy diverso y que tenemos una responsabilidad sobre el nivel de felicidad de la gente que nos rodea”, explica a RTVE.es Aitor Villafranca, uno de los ponentes voluntarios de Cogam, una de las asociaciones que imparte talleres en institutos y colegios madrileños.
Por eso, Guilló considera que estos talleres son importantes por un doble motivo: “los chavales LGTBI tienen una autoestima bastante baja, se sientes solos, aislados, y de repente ven personas como ellos que no son bichos raros, que tienen la vida normalizada”. Así, se trabaja “el empoderamiento y autoestima” para “que se sientan fuertes” a hacer frentes a posibles rechazos y a tener un “plan de acción” por si deciden “salir del armario”.
Villafranca reconoce que la pregunta más frecuente que le hacen en los talleres es cómo estos voluntarios hicieron pública su condición, por lo que muchas veces les ayudan desde su propia experiencia.
Pone de ejemplo cómo en uno de sus primeros talleres una adolescente que sólo le había dicho que era lesbiana a su mejor amiga, «viendo cómo reaccionaban en el taller sus compañeros, se animó a salir del armario por primera vez delante de todo el mundo y la recibieron súper bien». «Fue un momento muy potente, te das cuenta de que puedes ayudar a la gente. Ella nos dejó un mensaje diciendo que la habíamos ayudado a sentirse fuerte y eso me emocionó mucho», recuerda.
El segundo motivo de la importancia de estos talleres es que quienes los imparten trabajan para identificar casos de acoso y en trabajar con los propios agresores, porque muchos de ellos, expone Guilló, “también han sufrido discriminación” y por eso “es más fácil lograr que empaticen”. Por último, está el perfil del “observador”, el más habitual. “Les haces cuestionar sus prejuicios y lo agradecen muchísimo; les abres un mundo porque muchos no sabían cómo ayudar a sus compañeros o no percibían como discriminación ciertos comentarios o actitudes que ahora sí pese a que los puedan ver, por ejemplo, en televisión”, añade Guilló.
Tanto Guilló como Villafranca destacan la buena acogida que hay entre alumnos y padres y las buenas valoraciones (9/10) que han recibido en sus encuestas. Por eso aseguran: “Independientemente de todo el miedo que nos quieran meter, vamos a seguir trabajando para crear al alumnado un entorno más seguro en el que crecer y desarrollarse”.