Dejan sin títulos al Nobel que dice que los genes hacen a los negros menos inteligentes
El Confidencial. James Watson, premio Nobel de Medicina, asegura que la genética hace que las personas negras sean inferiores intelectualmente a los blancos
James Watson ganó el Premio Nobel de Medicina en 1962 por sus descubrimientos sobre el ADN. En la década de los 50 y junto a Francis Crick, descubrió la estructura de doble hélice del ADN, lo que le catapultó al premio. Sin embargo, sus declaraciones racistas medio siglo después han hecho que los laboratorios para los que trabajó le retiren sus títulos honoríficos.
En una entrevista en el ‘Sunday Times’ en 2007, Watson había asegurado que “era inherentemente pesimista con respecto a las perspectivas de África” porque “todas nuestras políticas sociales se basan en el hecho de que su inteligencia es la misma que la nuestra, mientras que todas las pruebas dicen que en realidad no”.
No solo eso. El científico, que ahora ha cumplido 90 años, dijo entonces que “las personas que tienen que lidiar con empleados negros consideran que eso no es cierto”.
Vuelve a la carga
Una década después, James Watson ha vuelto a ser protagonista por el mismo motivo. En un documental de la PBS, la televisión pública de Estados Unidos, titulado ‘American Masters: Decoding Watson’ (‘Maestros Americanos: Decodificando a Watson’), el Nobel se ha ratificado en las declaraciones que hizo en 2007.
Watson asegura que sus puntos de vista no habían cambiado con respecto a lo que dijo hace más de una década y eso ha llevado a los laboratorios Cold Spring Harbor a retirarle los títulos honoríficos que le había concedido previamente por sus investigaciones.
En un comunicado que recoge la CNN, el laboratorio explica que “rechaza inequívocamente las opiniones personales infundadas que expresó el doctor James D. Watson”, a la vez que califica sus declaraciones como “reprobables y sin sustento científico”. Además, “el laboratorio condena el uso indebido de la ciencia para justificar los prejuicios”, en referencia a los comentarios racistas vertidos por Watson.
Pero el racismo no ha sido la única obsesión de este premio Nobel. En 1997 declaró que las mujeres deberían poder abortar si se encontraba un gen de homosexualidad en el feto, mientras en 2000 dejó otra frase polémica: «Por qué existen los ‘latin lovers’, pero nunca se ha oído hablar de un amante inglés. Solo del paciente inglés”.