Dos menores de la manada de Burjassot aceptan tres y cuatro años de internamiento
El Norte de Castilla.- Dos de los cuatro menores acusados de violar a dos niñas en un palacete abandonado de Burjassot en mayo de 2022 han aceptado sendas penas de cuatro y tres años de internamiento tras una acuerdo de conformidad, y los otros dos procesados cumplirán una medida de cinco años de libertad vigilada con la asistencia a cursos de educación sexual.
Durante el tiempo de la condena, los menores encausados no podrán acercarse a las víctimas, que no han tenido que revivir la agresión. El juicio previsto para hoy no se ha celebrado tras el acuerdo de conformidad entre las partes. Las víctimas tenían 12 y 13 años cuando sucedieron los hechos.
La vista se ha celebrado a puerta cerrada con la asistencia de los padres de los acusados en la Sala Tirant II de la Ciudad de la Justicia, sin público ni medios de comunicación, tal y como establece la Ley del Menor. Un quinto menor implicado en la violación grupal de una de las menores es inimputable, ya que cuando sucedieron los hechos tenía menos de 14 años, la edad mínima para ser juzgado en España.
La abogada Isabel Carricondo, que ejerce la acusación particular en representación de la niña que sufrió la violación grupal, ha llegado a un acuerdo con los abogados defensores de los menores tras el pago de las indemnizaciones pactadas.
Los hechos ocurrieron el 16 de mayo de 2022 cuando cinco chicos violaron a una niña de 13 años. La otra menor que acompañaba a la víctima consiguió huir y denunció que también había sido violada por otro de los chicos, aunque esta segunda agresión sexual no quedó probada.
Otros tres jóvenes fueron arrestados por la Policía por su implicación en la violación grupal, pero manifestaron que no estaban en el palacete cuando sucedieron los hechos, y por ende, negaron su participación en la agresión sexual.
Dos de los menores reconocieron que mantuvieron relaciones sexuales con ellas, pero afirmaron que fueron consentidas, y uno de ellos declaró que se asustó y se marchó cuando vio llegar a cinco amigos de su barrio.
Las dos víctimas se habían conocido una semana antes a través de Instagram, mientras que los cinco detenidos son amigos y tienen entre 15 y 17 años de edad. Cuatro de ellos no tenían antecedentes policiales en el momento de su detención por la violación grupal y uno fue arrestado una vez por un robo con violencia.
Aunque las niñas incurrieron en contradicciones sobre el posible consentimiento que una de ellas habría dado para mantener relaciones sexuales con dos de los jóvenes, la Policía Nacional y la Fiscalía consideraron que había pruebas para acusar a cuatro menores de la violación en grupo y para atribuir a otro la agresión sexual que denunció la segunda niña.Comenta