El 99% de los alumnos valencianos ciegos lo hacen en centros ordinarios
COPE.- Un total de 648 estudiantes ciegos y con discapacidad visual grave inician el curso 2022-2023 en la Comunitat Valenciana, que afrontan con la implantación de la LOMLOE, la nueva ley de educación, en los cursos impares de Primaria, ESO, Bachillerato y ciclos formativos de grado básico.
El preámbulo de dicha ley afirma que las medidas que establece tienen como objetivo último reforzar la equidad y la capacidad inclusiva del sistema, «haciendo efectivo el derecho a la educación inclusiva como derecho humano para todas las personas, reconocido en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, ratificada por España en 2008″, según ha informado en un comunicado la ONCE.
Además, la educación de calidad inclusiva y para todos figura en el número 4 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, un derecho por el que la ONCE ha explicado que ha trabajado desde los inicios de la Organización y que está presente en toda la labor que lleva a cabo en materia de educación.
De hecho, más del 99 % de los casi 7.300 alumnos ciegos o con discapacidad visual que se incorporan a las aulas estos días lo hacen en centros ordinarios, en un modelo de educación inclusiva con apoyo de los servicios de atención educativa de la ONCE. Esto quiere decir que este alumnado sigue las mismas pautas y directrices que el resto de compañeros sin discapacidad visual.
La jefa de Atención Educativa de la ONCE, Ana María Llauradó, ha explicado que educación inclusiva «significa que no es el alumno el que debe integrarse en el sistema educativo, sino que son el propio sistema educativo y sus diferentes programas los que deben transformarse para incluir a toda la diversidad de alumnos atendiendo a sus necesidades, intereses y capacidades».
El Servicio Bibliográfico de la ONCE ha garantizado la accesibilidad preparando libros de texto en braille y en sonido y materiales en relieve, de forma que los chicos y chicas se incorporan a las aulas con la mochilas llenas de tecnología accesible y de puntos en braille.
Un total de 648 estudiantes ciegos y con discapacidad visual grave inician el curso 2022-2023 en la Comunitat Valenciana, que afrontan con la implantación de la LOMLOE, la nueva ley de educación, en los cursos impares de Primaria, ESO, Bachillerato y ciclos formativos de grado básico.
El preámbulo de dicha ley afirma que las medidas que establece tienen como objetivo último reforzar la equidad y la capacidad inclusiva del sistema, «haciendo efectivo el derecho a la educación inclusiva como derecho humano para todas las personas, reconocido en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, ratificada por España en 2008″, según ha informado en un comunicado la ONCE.
Además, la educación de calidad inclusiva y para todos figura en el número 4 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, un derecho por el que la ONCE ha explicado que ha trabajado desde los inicios de la Organización y que está presente en toda la labor que lleva a cabo en materia de educación.
De hecho, más del 99 % de los casi 7.300 alumnos ciegos o con discapacidad visual que se incorporan a las aulas estos días lo hacen en centros ordinarios, en un modelo de educación inclusiva con apoyo de los servicios de atención educativa de la ONCE. Esto quiere decir que este alumnado sigue las mismas pautas y directrices que el resto de compañeros sin discapacidad visual.
La jefa de Atención Educativa de la ONCE, Ana María Llauradó, ha explicado que educación inclusiva «significa que no es el alumno el que debe integrarse en el sistema educativo, sino que son el propio sistema educativo y sus diferentes programas los que deben transformarse para incluir a toda la diversidad de alumnos atendiendo a sus necesidades, intereses y capacidades».
El Servicio Bibliográfico de la ONCE ha garantizado la accesibilidad preparando libros de texto en braille y en sonido y materiales en relieve, de forma que los chicos y chicas se incorporan a las aulas con la mochilas llenas de tecnología accesible y de puntos en braille.
Los Equipos Específicos de Atención Educativa a la discapacidad visual de la ONCE han prestado un apoyo personalizado a los alumnos en sus centros educativos ordinarios, en base a los convenios de colaboración entre la ONCE y las diferentes administraciones educativas.
Estos equipos están formados un total de 417 maestros y maestras itinerantes, de los que 254 pertenecen a la ONCE y 163 los aportan las administraciones públicas.