El aplaudido discurso de Ana Peleteiro contra el racismo y la xenofobia en ‘El Hormiguero’
El Correo.- La medallista española en Tokio 2020 responde a los críticos que incendiaron las redes sociales tras sus declaraciones en las que afirmó que «no somos de color, somos negros»
«No somos de color, somos negros. De color son ellos, que cambian más de color que el sol». Ana Peleteiro realizaba estas declaraciones tras concluir los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Lo hacía con la medalla de bronce en la modalidad de triple salto colgada sobre el cuello y junto a Ray Zapata, amigo de la atleta y plata en la modalidad de gimnasia. Ambos de raza negra. En aquel momento, ese comentario incendió a las redes sociales que rápidamente se llenaron de todo tipo de comentarios. Un mes después, Peleteiro cuenta el por qué de esa frase y lanza un aplaudido discurso contra el racismo y la xenofobia.
Ray Zapata respondía a una de las preguntas de una periodista en Tokio de la siguiente manera: «Somos de color». Ana, a su lado, rápidamente le interrumpió. «No, somos negros». La lucha de la atleta gallega por normalizar la diferencia en el color de piel ha sido una constante en su vida. «Llegué a mi casa y le pregunté a mi sobrino Rodrigo. ¿De qué color soy? ‘Negra’. Y está bien. A mi me educaron para luchar por normalizarlo y ahora veo que se está logrando», contó Peleteiro en ‘ El Hormiguero’.
La gallega deja claro que nunca se ha sentido discriminada. «Yo soy española y nunca he sentido un desprecio por ser negra ni me han encasillado por ser extranjera». Aunque su amigo Ray no ha tenido tanta suerte. «Lo que hice fue quitarle hierro al asunto. Tú eres de aquí de toda la vida. Eres más canario que los plátanos de Canarias».
Ana Peleteiro hace un llamamiento para fijarse en los países vecinos. «La diferencia nos enriquece. Miremos a Italia y Alemania. A ellos les da igual. Lo que les importa es que sea de su país. Copiemos lo bueno». Y deja un mensaje en ‘El Hormiguero’ a quienes incendiaron las redes creando una polémica inexistente aquella mañana de agosto. «Los que han comentado de más son los que me odian desde siempre. Son tontos y no tienen nada que hacer con su vida».