«El Estado está fallando a los niños al dejarles desprotegidos ante las agresiones»
Fuente: EL Mundo
Fecha: 08/02/2018
Un niño de nueve años sufría presuntamente desde hace meses agresiones por parte de varios compañeros en un centro escolar de Jaén. La última de ellas le llevó al hospital y a romper un silencio impuesto bajo amenazas. Mientras sus compañeros de pupitre disfrutaban del recreo, él ha denunciado que era violado brutalmente por varios alumnos de entre 12 y 14 años. Conmoción y estupor general al conocerse la noticia. ¿Cómo es posible que ocurra un incidente de tal gravedad sin que nadie se percate de ello?
«Es totalmente inadmisible que un niño de nueve años esté siendo violado y no existan mecanismos que permitan prevenir y detectar estos abusos ni en el entorno escolar ni en el familiar. El Estado está fallando a estos niños, dejándoles desprotegidos ante agresiones que pueden provocarles daños físicos y psicológicos irreparables«, afirma Andrés Conde, director general de Save the Children.
Esta ONG, especializada en la defensa y protección de la infancia, reclama un compromiso político real para que haya una Ley integral que erradique todas las formas de violencia contra los menores, entre ellas el abuso sexual y el acoso escolar. Actualmente uno de cada 10 niños sufre acoso en el colegio y la mitad de las denuncias interpuestas por abusos sexuales tienen a un menor como víctima, subraya.
Poner límites a los abusos, las agresiones y el acoso y proteger a los niños supone garantizar por ley una formación específica a todos los profesionales que trabajen con menores para que sean capaces de prevenir y detectar cualquier tipo de violencia; dar a los niños una educación afectivo-sexual que les permita reconocer cuándo están siendo víctimas de abusos sexuales y establecer protocolos para prevenir, detectar y actuar en casos de acoso escolar.
En relación a los menores agresores, Save the Children, subraya la necesidad de declarar en situación de riesgo a los menores de 14 años que comentan infracciones contra otros niños para que reciban la formación y atención necesaria y tratar de evitar que vuelvan a cometer o sufrir otro delito y que la prescripción por delitos de abusos sexuales contra la infancia empiece a contar a partir de que la víctima cumpla 30 años, y no a partir de los 18 como hasta ahora.