La realidad del colectivo transexual en las aulas españolas

Fuente: El Economista
Fecha: 31/01/2018

Se denomina transexual a la persona que encuentra una seria disconformidad entre su sexo psicológico y los demás caracteres sexuales. De esta forma, sabe que su cuerpo pertenece a un género y su cerebro a otro. La transexualidad es una realidad muy discriminada en la sociedad de hoy en día.

La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) afirma que de todas las letras que componen su nombre, la T es la más vulnerable. Las personas transexuales se encuentran en un contexto social de rechazo, de marginación y de incomprensión generalizada. La persona transexual corrige la disociación que sufre su mente con su cuerpo poniendo acorde una con el otro mediante lo que se conoce como «cambio de sexo». El término correcto recibe el nombre de «Reasignación o Afirmación de sexo», ya que no supone un cambio para la persona, sino la reafirmación de lo que siempre ha sido. Esta cirugía ha ayudado a un número importante de personas a ser más felices y llevar una vida más productiva.

En cuanto al ámbito educativo, destaca firmemente la Universidad de Alicante que aprobó el «Protocolo Trans» más avanzado de todo el país. Incluye una tramitación rápida para el cambio de nombre elegido, la adaptación curricular en la etapa terapéutica, la articulación del uso de los espacios comunes y la inclusión de medidas docentes, investigadoras, formativas y de sensibilización.

El objetivo principal es garantizar de forma integral los derechos del colectivo trans universitario. Entre los aspectos más destacados se contempla la realización de acciones de concienciación, formación y protección. Además, la universidad se compromete a incluir cuartos de aseo, vestuario y duchas individuales, así como a estudiar la viabilidad de espacios «unisex» que serán señalizados de forma clara. El protocolo cuenta también con una relación de términos para clarificar el ámbito objetivo de aplicación del mismo.

Respecto a la discriminación laboral que sufren, cerca del 80% está en paro y muchas de ellas caen manos de redes de prostitución. Esta situación se debe a que las personas trans son obligatoriamente visibles y no se les contrata. De los pocos casos de éxito que se conocen son, o bien personas que ya formaban parte de una gran compañía cuando empezaron el cambio o personas que trabajan en entornos o empresas muy progresistas.

Existen diferentes asociaciones en España que mantienen una lucha continua por la igualdad y adaptación de estos colectivos en la sociedad. Una de ellas es Arcópoli, una asociación de voluntarios de la Comunidad de Madrid que trabaja por la equiparación social y legal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (LGTB) y la erradicación de cualquier forma de LFGTBfobia. Nacieron como una asociación universitaria de la Universidad Politécnica, cuyo objetivo principal es la defensa de las personas LGTB.

Desde Arcópoli mantienen, basándose en datos, que el número de incidentes LGTBfóbos está en aumento desde 2014. Un ejemplo de ello supone el informe que publicaron en 2016, donde recogían 240 incidentes; mientras que en el 2017 fueron cerca de 300. Estos son datos referidos a la comunidad LGTB en general, pero afirman que un alto porcentaje pertenece a esa T, que suele ser el colectivo más cerrado y con más problemas.

En 2016 se recogieron 240 incidentes

En cuanto a la Ley que ampara a estos colectivos, ha recibido numerables críticas debido a que establecía que a las personas trans se les iba a expedir la tarjeta sanitaria junto con otra serie de documentos, con su género sentido y el nombre adecuado, aunque no tuviesen aun el cambio oficial en el DNI y no se está haciendo. En la actualidad hay una propuesta del PSOE en el Congreso en el que se pide eliminar las esperas en el cambio de nombre del DNI.

Otra de las asociaciones que tiene un papel protagonista en la lucha contra la discriminación de este colectivo es COGAM, que trabaja por los Derechos Humanos y una sociedad más plural y respetuosa, promoviendo las condiciones para que la libertad y la igualdad de las personas y de los diversos grupos en que se integren sean reales y efectivas sin exclusiones.

Concretamente desde Transcogam, se intenta ser un grupo de acogida y orientación a las personas que se acercan, facilitando formación e información principalmente. Además, intervienen en actos públicos sobre la visualización.

Cerca de un 80% están en paro

No existe una legislación laboral específica ni medidas de contratación en la administración pública. Existen reticencias en partidos, asociaciones y sectores religiosos de ideología conservadora a aceptar los derechos humanos reconocidos a este colectivo en foros internacionales e incluso en las leyes propias como la Ley de la Comunidad de Madrid 2/2016.

Desde 2009, algunas comunidades autónomas han ido aprobando leyes referidas de forma expresa a las personas trans y al colectivo LGTB. En Madrid también destaca la Ley 3/206 de protección integral contra la LGTBfobia y la discriminación por razón de orientación e identidad sexual.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *