Nuevas agresiones a educadores y detenciones de ‘menas’ en el polémico centro de la Casa de Campo
El Mundo.- El polémico centro de menas de la Casa de Campo ha sido escenario de nuevas agresiones a educadores y de varias detenciones de los jóvenes magrebíes tutelados por la Comunidad de Madrid en el recinto que gestiona la Fundación Diagrama. El pasado 10 de febrero un menor argelino de 15 años fue arrestado por la Policía Nacional tras agredir a una trabajadora y el 14 de febrero otro menor pegó a un educador por negarse a hacer un taller de limpieza como castigo a su mal comportamiento. Además, a finales de enero otro menor 15 años fue arrestado en el centro para menores extranjeros no acompañados tras agredir a una cuidadora, amenazarla con agredirla sexualmente y romper varios cristales.
En la agresión del pasado día 14 de febrero el mena se negó a participar en un taller de limpieza pese a que se lo pidió el educador en varias ocasiones. El menor insultó al trabajador y le tiró una botella a la cabeza sin llegar a darle. A continuación le agarró de la sudadera y se la rompió mientras gritaba en perfecto español: «Sal fuera que te voy a reventar«. El mena cogió un teléfono delante del educador y le miró de forma desafiante haciéndole creer que llamaba a más personas para agredir al trabajador.
El centro de menas de la Casa de Campo está gestionado para la Comunidad de Madrid por la Fundación Diagrama, pero la Consejería de Asuntos Sociales ha convocado un concurso para renovar su gestión. Desde que los menas llegaron al albergue juvenil Richard Schirmann se han incrementado en la Casa de Campo los robos con violencia, según los vecinos y los sindicatos policiales. En concreto, los delitos violentos subieron un 611% el año pasado respecto al mismo periodo de 2019. Si entre junio de 2019 y junio de 2020 se produjeron 104 asaltos y atracos, en los 12 meses anteriores se registraron 17 en el pulmón madrileño.
Varias asociaciones de vecinos del barrio, el Ayuntamiento de Madrid, CCOO y CSIF se ha manifestado a favor de que el centro de menas de la Casa de Campo vuelva a ser a recuperar su función original. Algunas entidades creen que al ser la Casa de Campo un espacio catalogado como Bien de Interés Cultural no se podría haber hecho el cambio de uso del albergue y trasformarlo en un centro para menores extranjeros no acompañados.
El pasado 10 de febrero un mena del centro fue detenido por pegar a una cuidadora. La agresión vino porque la trabajadora se negó a dar unas llaves de una habitación al menor. En ese momento el adolescente agredió a la educadora que pidió ayuda a los vigilantes. El supuesto agresor pudo ser detenido con rapidez porque en la puerta del centro había dos policías nacionales que habían acudido al recinto, ya que otro mena se había dado a la fuga y saltó la valla tras amenazar y golpear a otra educadora.
También a finales de enero otro mena fue arrestado tras causar varios incidentes en el recinto en los que rompió varios cristales. Una cuidadora trató de frenar al joven, pero el menor golpeó a la mujer y luego amenazó con violarla. La empleada acabó con varias lesiones y denunciando los hechos en comisaría. El menor acabó en el Grume y al día siguiente regresó al centro. Asimismo, a mediados de enero dos menas insultaron, amenazaron y rompieron el coche de una educadora que les retiró la paga por inhalar disolvente en el centro de Casa de Campo. Los daños en el coche fueron cuantiosos y ahora el centro se niega a sufragar los desperfectos.