Siete adolescentes identificados por amenazar, robar y lesionar a otros menores en parques de Toledo
ABC.- Los imputados son varones de 15 a 17 años. A sus víctimas, de entre 13 y 15 años, les sustraían 1 ó 2 euros
Desde mediados de diciembre, la Policía Nacional se ha entrevistado con casi una treintena de víctimas y agresores, que actuaban en la zona de Buenavista
La superioridad numérica hacía más fuerte a un grupo de adolescentes de 15 a 17 años para amenazar, atemorizar y hasta causar lesiones leves a sus víctimas. Éstas eran también menores pero más pequeños, de 13 a 15 años, a los que robaban entre 1 y 2 euros en parques de Toledo.
Sin embargo, la Policía Nacional ha puesto coto a esa situación y ha identificado como presuntos autores a siete jóvenes, todos varones de 15 a 17 años, que forman parte de varios grupos que «tenían normalizado el uso de la violencia», según fuentes policiales consultadas por ABC.
Ocurría sobre todo en el parque de Bélgica y alrededores a última hora de la tarde. Esta amplia zona está dentro del barrio de Buenavista, muy cerca de la Jefatura Superior de Policía. Agentes de su Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer (UFAM) han llevado la investigación, que arrancó a mediados de diciembre a raíz de unas denuncias. Paralelamente, agentes uniformados y de paisano comenzaron a patrullar por los lugares señalados.
Pero el trabajo ha sido arduo por momentos, ya que algunas víctimas no han querido contarlo por miedo a represalias. Otros han narrado episodios de agresiones, robos con intimidación y también amenazas a través de redes sociales.
El arranque de las pesquisas
La primera denuncia llegó a la comisaría en noviembre. Se trataba de unas lesiones leves a un menor de 15 años. En diciembre se recogieron otras dos. Por un lado, un intento de robo con intimidación y lesiones; por otro, un ataque en el que la víctima había resultado también lesionada. Fue entonces, a mediados del último mes de 2020, cuando la UFAM abrió una investigación porque relacionaron los hechos.
Los agentes se entrevistaron con menores que declaraban situaciones de violencia similares, pero que no habían denunciado por temor a venganzas.
Durante las pesquisas, se registraron otras dos denuncias en febrero. En la primera se narraba una tentativa de robo con intimidación previa a unas lesiones leves. Los autores fueron a más y amenazaron a la víctima a través de las redes sociales. El segundo denunciante, por su parte, contó a la policía que fue víctima de un robo con intimidación.
En esta investigación policial, los agentes se entrevistaron y tomaron declaración a 27 menores, entre víctimas y agresores. Se conocieron otros dos episodios violentos, uno de ellos averiguado a finales de febrero aunque había ocurrido en noviembre. El menor no quiso contarlo antes. Y también se habló con adolescentes que no llegaron a denunciar.
A siete jóvenes se les imputa otros tantos delitos y la Fiscalía de Menores tiene conocimiento de su conducta. «Empleaban sobre todo la superioridad numérica para intimidar, aunque usaban la violencia si les hacía falta», señalan fuentes policiales.
Los agentes de la UFAM que se entrevistaron con los menores les dieron también pautas de actuación para evitar hechos similares. «Muchas veces -indican las mismas fuentes-, los menores se encuentran paralizados porque se enfrentan a situaciones que no han vivido nunca, y ni siquiera se lo cuentan a sus padres».
Ante la demanda de familiares de jóvenes de 13 a 15 años, la Policía Nacional ha intensificado su presencia en las zonas de ocio de Buenavista que frecuentan menores.