Terrible historia de ‘Bullying’ de un ex ACB: «Estuve dos días en coma tras una paliza»
Fuente: Marca
Fecha: 28/05/2017
El ‘bullying’ se ha convertido en uno de los temas que más preocupan a la sociedad actual. Sin embargo, el probema ya existía antes de que se le pusiera nombre y se activaran una serie de protocolos y campañas para intentar frenar el acoso escolar.
Una lacra que sufrió en sus carnes Iñaki Zubizarreta, ex pívot ACB que pasó por ‘Acento Robinson’ de la Cadena Ser para narrar su infierno particular. «Con 14 años medía 1,98 m y tenía muchísimos complejos. Me sentía como un monstruo», aseguraba el jugador madrileño, que recuerda el papel que jugaron sus profesores en su infierno particular.
«El psicólogo dijo que era retrasado mental y la tutora me dejó todo el año sin recreo porque podía hacer daño a otros niños. Me pusieron el apodo de ‘Jacobo, cuanto más alto más bobo’. La tutora, al pasar lista, me llamaba Jacobo. No veía salidas. Se lo conté a la tutora, se rió y dijo que eran cosas de chavales», confesó el jugador que desarrolló su carrera ACB entre Zaragoza y Valencia.
Zubizarreta fue un paso más allá en su relato y detalló algunos de los peores momentos que había vivido en su juventud. «Unos chavales mayores pasaron al acoso físico. Un día uno fue al baño, echó una cagada y me metieron la cabeza dentro», señala este ganador de la Copa del Rey en la temporada 97-98 con el Pamesa Valencia. «Un día decidí defenderme y me metieron una paliza que me dejaron dos días en coma».
El pívot de 2,07 que terminó su carrera en Bilbao tras tres temporadas entre LEB y LEB 2 quiso aprovechar su paso por la radio para convertirse en altavoz de todos aquellos que sufren esta lacra. «El bullying no es ninguna tontería. Son niños que se suicidan o que quedan marcados para siempre», apunta un Zubizarreta que decidió que aquella experiencia le tenía que ayudar. «Me prometí a mí mismo que nunca nadie más me iba a pisar en la vida. El que se ancla en la ira, en el rencor y en el odio lo único que va a conseguir es quemarse a sí mismo».