Unicef denuncia que tres de cada 10 niños en Madrid viven en riesgo de pobreza y exclusión social
Fuente: El Mundo
Fecha: 21/02/2018
Los datos que se ofrecen a continuación bastarían, por sí solos, para sacar los colores a las administraciones y gobiernos de Madrid. Pero si además se tiene en cuenta que lo que hay detrás de esos números son niños, entonces el tono de vergüenza sube de intensidad. Unicef Comité Madrid ha abordado, por primera vez, el análisis de los derechos de la infancia y la adolescencia en la Comunidad de Madrid y la radiografía que ha obtenido es desoladora.Para empezar, en 2016 (último dato disponible) 343.948 niños (29%) vivían en riesgo de pobreza y exclusión social en la Comunidad de Madrid, según el índice Arope (cuatro puntos menos que en el resto de España) y el 26,2% de la infancia estaba en riesgo de pobreza relativa.
La situación empeora, respecto al resto de comunidades, cuando se mira a la población infantil que vive en hogares con muy baja intensidad de trabajo, pues en este punto la región supera a la media nacional, con 144.695 niños (12,2%) frente al 11,6% del resto de España. Además, un 38% de los menores madrileños vivía en 2016 en hogares que no podían afrontar gastos imprevistos (41,2% a nivel estatal). Son las primeras cifras que recoge el informe que Unicef ha presentado este miércoles y para el que ha contado, además de los datos estadísticos (procedentes del INE, la Comunidad y los Ministerios, entre otras fuentes), con la voz de niños y adolescentes de ocho municipios madrileños (Alcalá de Henares, Alcobendas, Fuenlabrada, Humanes de Madrid, Leganés, Mancomunidad de Mejorada del Campo y Velilla de San Antonio y Rivas Vaciamadrid). Sólo con esas pinceladas iniciales, desde el organismo para los derechos de la infancia afirman, sin titubear, que «las políticas de reducción de la pobreza no están siendo efectivas en nuestra región».
En los últimos años, a raíz de la crisis, la pobreza infantil ha aumentado en Madrid debido, entre otros factores, «al incremento del desempleo y a un sistema de protección que evidencia debilidades a la hora de proteger a los niños y familias más vulnerables de la pobreza y la desigualdad«, indica Unicef, que insiste en que «las políticas aplicadas no han sido suficientes para enfrentar de forma eficaz un problema estructural que requiere de medidas concretas».
Y los niños son los peor parados cuando las cosas vienen mal dadas. España registra una de las tasas más altas de desigualdad de la OCDE y las evidencias muestran que los índices de desigualdad son más altos en la población infantil que en el resto y, además, crecen a un ritmo más rápido. Pero dentro del país es Madrid, junto con Canarias, la comunidad más desigual de España y se sitúa a la cabeza con la mayor desigualdad infantil y adolescente.
Retos educativos
Más información para sonrojarse. Según datos del Ministerio de Educación, la Comunidad de Madrid se encuentra a la cola de la inversión pública por alumno en centros públicos y concertados de educación no universitaria, con 3.857 euros, un 15% por debajo de la inversión media nacional, que es de 4.537 euros. Además de ser la comunidad que menos invierte en educación no universitaria Madrid es la única que destina menos de un 70% de su presupuesto (67,4%) a este concepto.
También es la última de la lista en inversión en educación secundaria y formación profesional y ocupa el sexto lugar en el ránking de comunidades que menos invierte proporcionalmente en educación infantil y primaria.
De hecho, Unicef pone de relieve que, tan sólo en lo referente a educación primaria, Madrid redujo en un 53,1% el importe de becas y ayudas entre 2010 y 2015, mientras que el número de ayudas de comedor entre los cursos 2009-2010 y 2013-2014 se redujo un 63%. Otro de los títulos no deseados que consigue la región es ser la comunidad autónoma donde un mayor porcentaje de chicos y chicas (29,6%) afirman estar agobiados o estresados por los deberes, cuatro puntos por encima de la media.Entre los desafíos en materia educativa a los que se enfrenta Madrid, Unicef ve urgente que se mejore la integración de alumnos con necesidades especiales, pues Madrid se encuentra entre las cinco comunidades autónomas con peores resultados en este tema.
El 77,9% de estos alumnos se encuentra integrado en centros educativos ordinarios, por debajo de la media nacional (82,6%).Como punto a favor, un poco de aire entre tanta espesura, el comité de Unicef destaca que «la tasa de abandono escolar temprano en la Comunidad de Madrid se ha reducido notablemente en la última década hasta alcanzar un 14,6% en términos absolutos en 2016». Madrid se encuentra por debajo de la media nacional en abandono escolar y tras Navarra, Cantabria y País Vasco es la que mejor nota saca en este indicador. No obstante, aún se encuentra tres puntos por encima de la media europea.
Mala distribución de la riqueza
Al estar los niños condicionados por el entorno en el que crecen y por la situación socioeconómica de sus progenitores, el informe también se ha fijado en las cuestiones monetarias. Y los aspectos sobre los que ha puesto la lupa dejan bastante que desear. Por ejemplo, Unicef recalca que la Renta Mínima de Inserción (RMI) en Madrid se ha mantenido congelada en los últimos años, con una cuantía individual mínima promedio de 375,55 euros, lo que la sitúa como la cuarta comunidad con la cuantía más reducida de su RMI.
Pero todo es susceptible de empeorar y eso es lo que sucede al mirar la cuantía máxima, que en Madrid alcanza tan sólo 532,51 euros por unidad familiar al mes, un 20% por debajo de la media nacional. El tercer peor dato, sólo por delante de Ceuta y La Rioja.La paradoja de esto es que Madrid, con la renta per cápita más elevada de toda España, «es a la vez una de las comunidades más ineficaces a la hora de redistribuir su riqueza para garantizar unos ingresos mínimos a las familias más vulnerables», manifiestan los autores del informe, quienes apuntan a los responsables al señalar que «la inequidad es evitable con voluntad política».Respecto a la evolución de la política de cooperación madrileña, la situación es igual de triste. «La Comunidad de Madrid, una de las más prósperas de España en términos presupuestarios, es también, tal y como señala Intermon Oxfam, la última comunidad autónoma en fondos destinados a cooperación para el desarrollo y acción humanitaria», recoge el documento del organismo por la infancia, que añade que «Madrid se encontraba en 2015 en sus mínimos históricos, con un descenso acumulado del 97% del presupuesto dedicado a cooperación desde 2008».
Un Pacto Autonómico por la Infancia y una meta: 2030
Este análisis de Unicef no pretende valorar sólo el estado actual de las cosas, sino establecer un punto de partida para mejorar con la vista puesta en el horizonte marcado por la comunidad internacional: el año 2030, fecha en la que los países que adoptaron la Agenda de Desarrollo Sostenible -España entre ellos- evaluarán si sus esfuerzos para lograr sociedades más inclusivas, equitativas y sostenibles han dado los resultados necesarios. Desde Unicef creen que, pese a la mala situación actual, «Madrid tiene la oportunidad y la posibilidad de abordar los desafíos que obstaculizan el cumplimiento de todos los derechos para todos los niños que viven en la región». Y, para contribuir a ese fin el organismo propone la adopción de un Pacto Autonómico por la Infancia y, además, da una serie de recomendaciones como «establecer una prestación por hijo a cargo de 1.200 euros al año, empezando por los más vulnerables, incorporar el enfoque de equidad en las políticas destinadas a la infancia, mejorar las políticas de protección social o aumentar la inversión media por alumno», entre otras.»Cuando ya han pasado nueve años desde que se desencadenase sobre España y otros países de las regiones más ricas del planeta una crisis económica y financiera con pocos precedentes, podemos afirmar que las tasas de pobreza y desigualdad en el ingreso se han incrementado de manera alarmante, con un efecto negativo para los niños en términos de protección e igualdad de oportunidades.
El incremento de la pobreza infantil es un indicador significativo de cara a valorar en qué medida los poderes públicos y la sociedad están protegiendo a la infancia y sus derechos», afirma Unicef.