Varias aficionadas denuncian que sufrieron abusos y acoso en el GP de Países Bajos
Más de 20 chicas que acudieron a ver el Gran Premio de Zandvoort han denunciado ser víctimas de acoso por diferentes personas. Por desgracia esto no es la primera vez que pasa, ya que en el pasado Gran Premio de Austria varias aficionadas denunciaron sufrir agresiones sexuales.
Al menos 25 chicas reportaron estas situaciones desde el viernes, día en que dan comienzo los primeros entrenamientos libres. Lo hicieron a través de ‘Formula 1 Women’, un club de mujeres que son aficionadas al ‘Gran Circo’.
La fundadora de este club de fans, Svenja Tillemans, ha denunciado en la televisión pública ‘NOS’, que a las víctimas las hicieron fotos sin su permiso, las agredieron verbalmente y las tocaron diferentes partes de su cuerpo también sin su consentimiento.
Este es el testimonio de una de las afectadas, Naomi, de 21 años: «Llevaba dos años esperando, pero después de la experiencia de este fin de semana, no creo que quiera volver a la Fórmula 1. Nunca me había sentido tan sucia, humillada e inferior en un evento, tan insegura«. Ella también ha destacado que fue a la carrera junto a su padre y que recibía insultos cada vez que se quedaba sola.
Pero no solo se queda ahí. Ella tenía tiritas puestas en las rodillas ya que tenía heridas en dicha zona. Un par de aficionados, al ver esto, la lanzaron comentarios lamentables como «se lo había pasado muy bien de rodillas por la noche» o «¡Qué noche más ocupada has tenido!».
«Como mujer sola me parece horrible»
Otra chica de 43 años, Sara, fue grabada sin su permiso cuando bailaba tranquilamente en la grada. Además, un hombre la agarró de la mano y otro la cortó el paso cuando quería ir al baño. «Claro que quiero ir de nuevo, pero tiene que haber un hombre conmigo. Como mujer sola me parece horrible«, señala.
La organización del evento desplegó cámaras de seguridad, vigilantes y guardias adicionales para garantizar la seguridad del Gran Premio. Incluso se llegó a habilitar un número de emergencia al que los asistentes al evento podían enviar un mensaje para que se mantuviera un ambiente seguro entre los aficionados.
